Generalmente cuando pasas mucho tiempo y vemos que siempre nuestra casa está igual, nos vemos estancados porque pensamos que “hacer una reforma, es mucho lío”. Y empezamos a mover los muebles de sitio, para ver si conseguimos darle un toque diferente, o simplemente encontrar algo nuevo. Pero todo tiene su límite…

Y es que a veces, no se nos pasa por la cabeza siquiera que no es necesario reformar toda la casa o el piso entero. Quizás si nos vamos poniendo pequeñas metas, al final podamos conseguir ese cambio que tanto necesitamos.

Vamos a ir paso a paso.

El Recibidor

Es lo primero que ves cuando entras. Es tu carta de presentación a tu casa, es… ¡como la fotografía de un currículum!

También es ese espacio que nos da pistas de lo que nos podremos encontrar pasada la siguiente puerta. Por tanto, es un espacio muy importante que tiene que ir en consonancia con el resto del piso.

Aunque pensemos que es muy pequeño o que no hay casi nada que hacer.

Una capa de pintura bonita, en una sola pared para dar más intensidad y que tenga un toque más transgresor.

Poner un cuadro para dar la bienvenida a tu hogar es de buena educación o incluso una frase que transmita cuales son los valores en tu casa. O incluso un vinilo que saque una sonrisa a tus invitados.

Por supuesto, un espejo será fundamental  para verte cuando salgas de casa…

El Comedor

Es dónde pasamos más tiempo. Por tanto, si ponemos una iluminación correcta en toda la casa, contribuirá a darle un aire nuevo y más confortable. Distribuir bien los puntos de luz con lámparas, focos…ayudará a reducir también el gasto de luz.

Los espejos también son importantes ya que distribuidos pueden hacer que parezca una zona más amplia, más profunda o incluso una zona muy oscura puede llegar a tener más luminosidad.

Los textiles también juegan para hacer que nuestro comedor sea otro. Podemos cambiar las sillas o simplemente cambiar cojines.

Pintar alguna pared de un color diferente al resto, también contribuirá a resaltar una zona en concreto.

Baño

Si tenemos una bañera, podemos cambiarla por un plato de ducha. Así conseguiremos crear más espacio en el interior del baño.

En cuanto a los sanitarios, si no están en mal estado, una opción sería cambiar la grifería del lavabo y de la ducha. En el caso del inodoro, se puede sustituir tan sólo la tapa por una más moderna.

Cocina

Cambiar los azulejos de toda la cocina sería el cambio más característico para darle un cambio completo… pero si vemos que están bien, podemos cambiar los mármoles, cambiar los tiradores de los muebles, poner cortinas de colores llamativos o decorar una pared con un reloj llamativo y una buena lámpara.

¡Incluso hay unas nuevas pinturas que puedes poner encima de los azulejos!

Estos pequeños cambios, harán que puedas estar bien en tu casa sin gastar mucho dinero, pero dándole personalidad y adaptándola a lo que necesites.

Y hablando de necesidades, ya sabes que estamos aquí para lo que necesites 🙂